viernes, 30 de septiembre de 2011

desarrollo!

El Aedes aegypti (nombre científico), o mejor conocido por nosotros como el dengue, es un pequeño insecto descrito por Linneo en 1762, tiene su origen en África, en la región etiópica donde se concentra la mayor cantidad de especies del subgénero. De éste se conocen tres variedades principales: Aedes aegypti variante aegypti, Aedes aegypti var. formosus y Aedes aegypti var. queenslandensis. La variante aegypti es la más distribuida en el mundo.
Se conoce que la variante queenslandersis es parecida a la aegypti en todos los aspectos. La variedad formosus está confinada a ciertas africanas y difiere en su taxonomía y biología selvática.
El Aedes aegypti mide aproximadamente unos 5 milímetros de largo. Es de color negro y posee patas largas con anilladas blancas, que pueden observarse detalladamente mediante un microscopio óptico. Estas manchas blancas son características de la especie a que el mosquito pertenece. El Aedes aegypti posee una marca distintiva, que es una lira en el dorso del tórax formada de escamas claras (blancas). Si bien las hembras y los machos tienen diseños parecidos, estos últimos son menos robustos.
Ambos liban néctar o líquidos dulces, pero sólo las hembras son hematófagas Este artrópodo es de los principales transmisores de la enfermedad del dengue y de la fiebre amarilla, y una de las 56 especies halladas en Latinoamérica. Este insecto tiene una apariencia inofensiva y suele pasar desapercibido, ya que las hembras han reducido el zumbido que provocan al volar.
Dengue: La enfermedad

El Dengue es una enfermedad vírica, infecciosa, contagiosa tropical caracterizada por fiebre y dolor intenso en las articulaciones y músculos, inflamación de los ganglios linfáticos y erupción en la piel. La enfermedad del dengue es endémica en algunas zonas de los trópicos y han aparecido epidemias en países tropicales y templados. No suele ser fatal y con frecuencia tiene una evolución de seis a siete días, pero la conducencia es larga y lenta. Una forma más grave pero rara es la fiebre hemorrágica del dengue. Carece de tratamiento específico.
Esta enfermedad es transmitida por la picadura de un mosquito tropical. Este mosquito, en la mayoría de los casos, suele ser el Aedes aegypti, así como otras especies de este género, o incluso, en casos muy raros por el Culex.
El Aedes aegypti se distingue de las otras especies por su morfología y por la forma en que se posa en la piel, al momento de picar.
La infección del dengue es causada por un virus de la familia Flavovirus. Este virus tiene cuatro variedades, es decir, hay cuatro virus del dengue semejantes entre sí, pero no iguales, identificados por números:
  • Dengue – 1
  • Dengue – 2
  • Dengue – 3
  • Dengue – 4
Cualquiera de estas cuatro variedades o serotipos puede producir la enfermedad. El más frecuente en el dengue clásico es el serotipo 1, que a su vez es el menos frecuente en el dengue hemorrágico.
  • Sinónimo usados frecuentemente para referirse al dengue: Fiebre roja, Fiebre rompehuesos o Fiebre Dandy.
  1. El dengue es una enfermedad vírica febril y aguda que se caracteriza por un comienzo repentino, fiebre que dura de tres a cinco días (rara vez más de siete días, y suele ser difásica), cefalea intensa, mialgias, cutralgia, dolores musculares y articulares, adenopatías y una erupción urticariana o morbiliforme sincrónica con el retorno de la fiebre.
    Hay falta de apetito en el enfermo, provocando así alteraciones en el aparato digestivo y debilitamiento del cuerpo.
    Para la fecha en que la fiebre muestra defervescencia suele aparecer una erupción generalizada. En cualquier momento de la fase febril pueden aparecer fenómenos hemorrágicos de poca intensidad, como petequias, epistaxis o neurotrorragia. En las personas de piel oscura la erupción a menudo no es visible; la recuperación puede acompañarse de fatiga y depresión duraderas. Las epidemias tienen carácter explosivo, pero la tasa de letalidad es muy baja, siempre que no aparezca el dengue hemorrágico. El diagnóstico diferencial incluye todas las enfermedades epidemiológicamente importantes incluidas bajo los rubros de fiebres víricas transmitidas por artrópodos, sarampión y otras enfermedades febriles sistemáticas.
    El agente patógeno es un arbovirus que se transmite al hombre por la picadura del Aedes Aegypti.

  1. Síntomas:
Los síntomas que se presentan durante la enfermedad del dengue, varían según el tipo y gravedad (Dengue clásico o Dengue Hemorrágico), y según la edad y el estado general de salud del paciente, Esto quiere decir que los niños afectados no van a reaccionar de la misma manera que un adulto.
Y en cuanto a síntomas, los lactantes y niños pequeños pueden presentar un cuadro de fiebre y erupción "sarampionoide", difícil de distinguir de la gripe, sarampión, paludismo y otras enfermedades febriles.
En cambio, los adolescentes y adultos pueden presentar síntomas análogos o un cuadro sintomático variable entre leve y grave.
Estos síntomas varían en cada persona según su susceptibilidad y según el mecanismo de defensa que poseen.

viernes, 23 de septiembre de 2011

Introduccion

El dengue es una enfermedad viral aguda, producida por el virus del dengue, transmitida por el mosquito Aedes aegypti o el mosquito Aedes albopictus que se crían en el agua acumulada en recipientes y objetos en desuso. El dengue es causado por cuatro serotipos del virus del dengue: DEN-1, DEN-2, DEN-3 ó DEN-4; estrechamente relacionados con los serotipos del género Flavivirus, de la familia Flaviviridae.[1] Esta enfermedad es más frecuente en niños, adolescentes y adultos jóvenes. Se caracteriza por una fiebre de aparición súbita que dura de 3 a 7 días acompañada de dolor de cabeza, articulaciones y músculos.[2] Una variedad potencialmente mortal de la fiebre del dengue es el dengue grave que cursa con pérdida de líquido o sangrados o daño grave de órganos, que puede desencadenar la muerte. Es una misma enfermedad, con distintas manifestaciones, transmitidas por el predominante en áreas tropicales y subtropicales (África, norte de Australia, Sudamérica, Centroamérica y México); aunque desde la primera década del s. XXI se han reportado casos epidémicos en otras regiones de Norteamérica y en Europa